Tarde o tempano sentimos que nuestro interior vibra con un deseo. Y ahí se pone en marcha el botón de la búsqueda.
Iniciamos entonces el camino de nuestra leyenda personal. Y al recorrerlo, vamos descubrendo quiénes somos y cuál es nuestra búsqueda.
Quién no desista de la búsqueda vencerá.